La Yapa Centromericana:

Unas pocas fotitos de nuestro dia a dia:

Agus a veces pierde la paciencia...

Lo nuestro sin dudas es la navegacion:

Veinti tantos años despues... el lagarto sigue al sol...

Meñique vuelve al movimiento...

Queridos y desorientados lectores... ya pasaron un par de meses desde la ultima vez que tuvieron noticias de los 2 dedos que quedaron en Venezuela. Pues bien, las cosas han cambiado un poco desde entonces.

Mientras el Dedo Mayor recorria Centroamerica, nuestro Pulgar (Santiaguito) demostraba en tierra Chavista que tiene macrame absoluto, una paciencia infinita para la venta en la playa y una escritura prodigiosa, pero, cansado ya de mi perdida de pelo y con 4 globulos rojos dandole vueltas por ahi, decidio que era momento de regresar al pago a comerse unos buenos asados.

Nada pude hacer para impredirlo; le hable de playas paradisiacas, de volcanes magicos, de ruinas mayas y de bananas bañadas en chocolate, pero el solo me escuchaba con la mirada perdida y repetia una y otra vez "Chinchulines". Comprendi que eran vanos mis esfuerzos y lo despedi una noche, viendolo alejarse con su mochilita al hombro, feliz con su retorno.

En Coro quedamos mis 4 globulitos, la pandilla tuntunera y yo, que habia decidido seguir viaje una vez que juntase los morlacos necesarios. Dio comienzo asi la "Operacion cintillo"... durante un mes y medio teji mas cintillos de los autorizados por la Organizacion mundial de la salud y comprobe, ademas, que la diplomacia de mi hermano no me habia tocado a mi en la repartija de genes. Aun asi acudi puntualmente todos los fines de semana a Villa Glamour, arrastrando mi asadelta, a vender la preciada mercancia y comer empanadas de cason en cantidades industriales.

Finalmente llego el dia: con bastantes neuronas menos y mucha pena, deje Casa Tun Tun y me despedi de Napoleon, Simon y Machete a quienes extraño todavia. Por suerte "Morocco" Sarah, una amiga de Tun Tun, se habia entretenido con algunos asuntilos en Taganga y me fui a su encuentro. Antes tuve que pasar por la "Frontera de las coimas", repitiendo la experiencia que 3 meses antes habia vivido nuestro Dedo Mayor. Tras 15 horas de viaje llegue a Taganga feliz de estar en Colombia nuevamente y de reencontrarme con la mas latina de las inglesas. Decidi ahi que mi cruce a Centroamerica seria por avion... llamenme cobarde si quieren, pero las otras vias posibles me generaban cierta desconfianza.

En Panama ciudad me esperaba Agustina "Mu mu mu mu" bronceada por el sol dominicano y su mama Fabiana, que habi ido a visitarla.

Nuestro reencuantro fue de lo mas glamoroso: mi mochila polvorienta sobre el carro dorado de un hotel con varias estrellas y yo, igual de polvorienta que mi mochila, con un colorido coctel de bienvenida en la mano, que perdi de vista una vez que ella aparecio por el lujosos ascensor.

Fabiana me adopto por un dia y nos llevo a recorrer la ciudad, con Canal incluido. Tambien nos invito a comer a lugares que yo habia olvidado que existian. Con un par de globulos rojos mas y bastante pena, la despedimos al dia siguiente y retornamos a la vida de viajeras pobres. Le dedicamos otro dia a la ciudad y nos fuimos buscando playita a Bocas del Toro.

Lancha para aca, lancha para alla, recorrimos lo que pudimos de ese archipielago tipicamente caribeño. Tambien nosotras vimos los delfines que Nico habia intentado tocar (le mandan saludos y que la proxima vez use patas de rana).

En Cayo Zapatilla me hice amiga de un cardumen con el que estuve recrriendo el arrecife un buen rato y en Isla Bastimentos nos hubieramos quedado a vivir, entre casas de colores y muelles.

La visita a Panama fue rapida... mi bolsillo anda lamentandose en estos paises a precio dolar.
Salomon, un simpatiquisimo panameño, nos llevo a la frontera y nos despedimos de la tierra de Ruben Blades para entrar a Costa Rica.

Como si el Dedo Mayor nos hubiera ido dejando migas en el camino, tambien nosotras llegamos a Puerto Viejo, un pueblito transformado por el turismo que aun asi guarda cierto encanto gracias a una vegetacion impresionante... como toda Costa Rica. El Parque Nacional Cahuita espera con sus monos, osos hormigueros y vivorillas en un recorrido de 8 kilometros que bien vale la pena. Ya Nico subio fotos en su paso por alla, asi que no me tomare yo la molestia...

Dejamos la costa Caribe costarricense para llegar a la lluviosa San Jose, que nos recibio con un fuerte aguacero... el mismo que al dia siguiente nos acompaño a travez de valles de un verde intenso y se quedo con nostras durante tres dias y tres noches en el pueblito de Santa Teresa (costa Pacifica del pais).

Costa Rica es hermosa, todo hay que decirlo, salen plantas hasta de los postes de alambrado y la gente es buena onda, pero la epoca de lluvias no es el mejor momento para visitarla.

Con algo de lastima, pero tambien con bastantes ganas de "volver" a Latinoamerica, encaramos hacia Nicaragua, pais hermosisimo, con gente de lo mas amigable que de verdad se merece un capitulo aparte. Los dejo por hoy, mandando besos y abrazos y este adelanto para que vean lo que se viene...

lagarto al sol

¿En qué playas andarás ahora?